Si de algo nunca me cansaré es de visitar París, desde el primer momento que pisé sus calles hace ya 5 años supe que volvería una y otra vez, esto es algo que solo me ha sucedido en dos ocasiones, la primera hace 9 años cuando vi la Gran Vía Madrileña y recorrí barrios como Malasaña y Chueca. Pero París es París y si allí encima se encuentra esa gente que da sentido a todo, mejor.